Desenterrando el Silencio
Desenterrando el Silencio, por Sergi Bernal
“Desenterrando el silencio” es un proyecto fotográfico que empieza a cobrar vida en junio de 2010, después de que el georadar del Grupo de Ciencias Aranzadi localizase unos casquillos de bala y unos restos humanos en una zona de los Montes de La Pedraja, en Burgos.
Se trata de una fosa común que ha permanecido escondida durante 74 años, los familiares y algunos vecinos sabían que en aquel lugar había centenares de asesinados por el fascismo, asesinados por ser personas reivindicativas, de izquierdas, sindicalistas, republicanos,…..











This book examines the contested representations of those murdered during the Spanish Civil War of the 1930s in two small rural communities as they undergo the experience of exhumation, identification, and reburial from nearby mass graves. Based on interviews with relatives of the dead, community members and forensic archaeologists, it pays close attention to the role of excavated objects and images in breaking the pact of silence that surrounded the memory of these painful events for decades afterward. It also assesses the significance of archaeological and forensic practices in changing relationships between the living and dead. The exposure of graves has opened up a discursive space in Spanish society for multiple representations to be made of the war dead and of Spain’s traumatic past.
Durante la Guerra Civil española, cerca de 200.000 hombres y mujeres fueron asesinados lejos del frente, ejecutados extrajudicialmente o tras precarios procesos legales, y al menos 300.000 personas perdieron la vida en los frentes de batalla. Un número desconocido fueron víctimas de los bombardeos y los éxodos que siguieron a la ocupación del territorio por parte de las fuerzas militares de Franco. En el conjunto de España, tras la victoria definitiva de los rebeldes a finales de marzo de 1939, alrededor de 20.000 republicanos fueron ejecutados. Muchos más murieron de hambre y enfermedades en prisiones y campos de concentración, donde se hacinaban en condiciones infrahumanas. Otros sucumbieron a las duras condiciones de los batallones de trabajo. A más de medio millón de refugiados no les quedó más salida que el exilio, y muchos perecieron en los campos de internamiento franceses. Varios miles acabaron en los campos de exterminio nazis. Todo ello constituye lo que a mi juicio puede llamarse el «holocausto español». El propósito de este libro es mostrar, en la medida de lo posible, lo que aconteció a la población civil y desentrañar los porqués.